Francisco Martínez, el zurdo regiomontano que brilló con Sultanes de Monterrey.

El nativo de Monterrey debutó en 1971, convirtiéndose en uno de los mejores lanzadores de la escuadra que comandaba Manuel Magallón, al finalizar con siete victorias y dos derrotas, aunado a una magnífica efectividad de 2.09. Sus cifras fueron dignas del nombramiento al mejor Novato del Año, sin embargo, el reconocimiento fue para Miguel Suárez de los Diablos Rojos del México, que tuvo un debut espectacular.

Martínez lanzó en 30 juegos, con tres encuentros completos y tres blanqueadas, 33 bases por bolas y 59 ponches en 82 innings de trabajo.

El zurdo fue producto de la camada de jóvenes peloteros forjados en la organización sultán bajo la mirada de Jesús Valtier.

En sus siguientes cuatro campañas el zurdo tuvo números regulares, pero su mejor temporada fue la concerniente a 1976, terminando con 15 victorias y 11 derrotas, con un impactante promedio de 2.01 en carreras limpias admitidas en 193 entradas lanzadas. Su trabajo fue digno del mejor serpentinero de aquellos tiempos.

Un año más tarde tuvo una temporada de 13 triunfos y 13 derrotas, con 3.46 de efectividad, convertido en uno de los pilares del staff de serpentineros Sultanes, junto a Luis Peñalver, Carlos Carrasco y Larry Volkening. Lamentablemente, en 1978 tuvo un año mediocre al finalizar con récord de 6-12, motivando su salida del club, yendo a parar a los Tigres capitalinos, quienes lo enviaron ese mismo año al equipo de Córdoba.

Sus cifras fueron regulares a partir de entonces, vistiendo el uniforme de Aguascalientes en 1980, sus siguientes dos temporadas fueron con Nuevo Laredo, despidiéndose como pelotero activo en 1983 con los Indios de Cd. Juárez, ya desaparecidos.

El regiomontano encabezó al club en efectividad (2.01), así como en ganados y perdidos (15-11 .577) en la campaña de 1976, demostrando su categoría sobre la lomita de lanzadores. Su participación fue de 13 temporadas en la Liga Mexicana de Beisbol, ocho de ellas con Sultanes, finalizando con 78-71 en ganados y perdidos, con 3.30 de efectividad y 629 ponches.